San Ignacio o Iñigo de Loyola nació en el año de 1491 en el castillo de Loyola en Azpeitia, población de Guipúzcoa, cerca de los Pirineos. Sus padres fueron Beltrán Yáñez de Oñaz y Loyola y doña María Sáenz de Balda. Fue bautizado por el rector Juan de Zabala en la iglesia parroquial de Azpeitia. Esta obra se compone de tres escenas distintas, dos de ellas relacionadas con la vida de san Ignacio y la tercera con la vida de Jesús. En primer plano se observa el nacimiento del santo; la madre de Ignacio aparece recostada, curiosamente en el suelo, entre ricas telas y cojines, rodeada por un grupo de mujeres, mientras el recién nacido es rodeado por varias mujeres dispuestas a bañarlo; grupo representado muy a la manera de las fórmulas de Francisco Pacheco, el tratadista español del siglo XVII. En lo que constituye "un cuadro dentro del cuadro", se ve el bautizo de san Ignacio. Claramente se distingue entre el grupo a su padre, quien lo sostiene en sus brazos, junto a su madre y al sacerdote celebrante. En la filacteria que parte de la figura del recién nacido, se lee: "YGNACIO ES MI NOMBRE". El grupo se ve acompañado por dos capellanes y dos pequeños niños jugando. La tercera escena que se encuentra a la izquierda es la del nacimiento de Jesús, en la que aparecen únicamente la Virgen, san José y el Niño en el pesebre.La firma en esta obra, como lo asienta Francisco de la Maza, (1) presenta letra diferente de otras firmas del mismo autor, acercándose más esta caligrafía a la de la firma de Carlos de Villalpando.

1. Francisco de la Maza, El pintor Cristóbal de Villapando, p. 227.