Entrevista realizada a Cristina Ulibarri por Matilde Mantecón
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- Título(s)
- Título
- Entrevista realizada a Cristina Ulibarri por Matilde Mantecón
- Proyecto de historia oral. Refugiados españoles en México
- Contenido
ANTECEDENTES: Nace en Santander en 1917, de familia campesina. Recibe educación religiosa y cursa dos años de primaria. A los 10 años sale a trabajar de sirvienta. Primeros desengaños religiosos. Primeras lecturas sobre socialismo. Trabaja en Bilbao para unos nacionalistas vascos. Conoce a Santiago Viguera y entra en contacto con las Juventudes Socialistas.
REPÚBLICA: Muy jóven aun, reacciona con curiosidad ante el derrocamiento del Rey y la proclamación de la República. Se muestra a favor del alzamiento minero en Vizcaya y Asturias en 1934. Presencia la salida de los mineros presos en Bilbao. Santiago Viguera es encarcelado, junto con otros muchos, por su participación en la huelga minera de Vizcaya. Critica el acoso a los nacionalistas vascos. Primer contacto con mexicanos en Bilbao. Se hace novia de Santiago Viguera.
GUERRA CIVIL: El proyecto de los nacionalistas vascos en Bilbao. Se alista como enfermera, por la UGT, en Bilbao. Participación de los curas en la guerra. Santiago Viguera marcha al frente y es herido de gravedad. Toma parte en la defensa de Vizcaya y es condecorada por el gobierno de Aguirre. Se constituye la Juventud Socialista Unificada. Al caer Bilbao, pasa a Santander y luego, junto con Santiago Viguera, se refugia en Asturias. Salen juntos a Francia, llegan a Pauillac y vuelven a entrar a España por Cataluña. Santiago Viguera es hospitalizado en Barcelona, después en Valencia en Gerona; se casan en Gerona y él marcha al Ebro. Ella permanece en Gerona, con otros emigrados del norte, y ahí nace su hija. Dificultades para subsistir en Gerona; caída de Cataluña y salida a Francia con su hija.
EXILIO: Estancia y penalidades en Bourg de Péage y Pierrelatte. Santiago Viguera pasa por varios campos de concentración en Francia y finalmente es trasladado a un hospital de Bayona. Salida, por Burdeos, en el barco La Salle hacia la Repóblica Dominicana. Primeras impresiones y contactos con el pueblo dominicano. Estancia en Dabajón y El Seibo. Vida en colectividad y actividad teatral en la colonia Pedro Sánchez. Les es retirado el subsidio de la República y se marchan a la capital dominicana. Se emplea con una familia española de antiguos residentes y, junto con su esposo, se establece en comunidad con otros emigrados. Por mediación de los cuáqueros, Santiago Viguera sale del país. Se reúne con su marido en Cuba. Tras una breve estancia ahí, llegan a México en 1944. Ayuda al SERE. Choques con los antiguos residentes. Impresiones acerca de los mexicanos. Solidaridad entre los emigrados. Trabajo y vida cotidiana en el Distrito Federal. Traslado y estancia en Veracruz, donde nace su segundo hijo. Participación en una granja instalada por el PCE. Enfrentamientos con la policía montada en Las Granjas. Su esposo muere en 1954. Trabajó en el Frontón Colón y el Frontón Metropolitano. Matrimonio de su hija con un mexicano. Relatos de sus años de trabajo en el frontón, 1954-1972. Viaja a España en 1960. Participa en el conflicto laboral de los trabajadores del Frontón Metropolitano. Segundo matrimonio y militancia en el PCE. Opina sobre las circunstancias actuales de la izquierda española y la situación política en España. Sentimientos hacia México y España. Segundo viaje a España. Trayectoria de sus hijos: la cuestión de la identidad.
- Fragmento
CU.- Todo lo que se podía se ayudaba, tanto en, tanto en el grupo de Partido Comunista Español como en el grupo de, de las Mujeres Antifascistas españolas. O sea que siempre se ha ayudado, ¿no?
MM.- Oye, y cuando murió Franco, ¿qué, qué sentiste? ¿cuál fue tu reacción?
CU.- Pues mi reaccion… hice… o sea, alegría desde luego, y pensar… ¿qué te diré yo? ¿cómo se dice esto que, que sucede en la vida? Yo tengo una manera de ser que no se cómo explicártelo, como que presiento las cosas. Y, y mi difunto marido me decía que era una condición de clase que tiene uno, no sé por qué razón pero que así es, ¿no? Porque has sufrido desde chica o porque has trabajado desde chica o lo que sea, o porque has visto muchos desengaños, que te vas dando cuenta; o sea, siempre tengo una suspicacia, ¿verdad? Y aunque me dio mucho gusto y todo, y estoy feliz de que eso haya sucedido, y sé que cuesta mucho sacar adelante el país y que nos costará muchísimo, que quién sabe si lo lleguemos nosotros a ver; ver en España, digamos, pues un socialismo, ¿verdad?, o algo así, moderado, yo no pido…
MM.- Extremos.
CU.- … extremos sino que… pues lo veo difícil. Y claro, me dicen que soy… ¿cómo se dice? ¿optimista o pesimista?
MM.- Sí. Pe…
CU.- ¿Cómo se dice? Cuando uno presiente una cosa, que, que, que no lo ves claro.
MM.- Ajá.
CU.- ¿Optimista o pesimista?
MM.- Pesimista.
CU.- Pesimista. Y yo no lo veo claro porque, por ejemplo, cuando…
MM.- Pesimista…
CU.- Eso es. Cuando me dicen, aunque yo creo en eso y no cedo ni me baja la moral -porque no me baja la moral para, eso a mí para nada-, pero sin embargo siento feo esa, esas situaciones. Por ejemplo, la unificación con los socialistas: yo sé que no se hará nunca.
MM.- Y que esté el rey y lo encabece, sobre todo [risa].
CU.- Bueno, el rey yo lo admito porque, aunque hayamos luchado contra el rey, con el rey hemos nacido, ¿verdad?, la mayoría de los que emigramos. Esto, y aunque esté el rey… el rey va parando la, la situación que hoy hay en España. Porque en España hay una situación que no es fácil resolver ni con las izquierdas ni con las derechas, ni con los republicanos ni con los socialistas ni con nadie. rorque han dejado ellos una papeleta muy fea y que solamente -se puede decir, a pesar de, de, de nuestro desconforme- gracias al rey se está aguantando el que no haya habido una revuelta. La, la verdad es esa, no nos engañemos. Porque nuestro pueblo [ininteligible] en contra de las fuerzas que estábamos fuera. ¿Entonces? Si, si hubiese habido un golpe militar o algo así, ¿qué? Los socialistas, que somos los que debimos de haber estado juntos… Como yo le dije una vez a Chucho, a Chucho Bernárdez, del Centro Republicano, digo: "¿Por qué salimos de España? Por la guerra, ¿verdad? ¿No podemos unirnos lo mismo que entonces para poder regresar a ello? O sea, dejar nuestra parte un poquito a un lado… no dejarla: ni, ni tú tu partido, ni yo el mío, ni el otro ni el otro, pero unirnos en las cosas elementales para luchar contra estas cosas. Y me decía él que, que eso que no es posible.
MM.- Hay un interés de partido.
CU.- Sí. Y no, no es posible, y no se reúnen. Yo lo, se, que no hay unificación, es muy difícil porque… la familia de mi primer marido es de origen socialista y yo me he dado cuenta de los problemas que había; aunque con ellos no, pero sí había con mi hermano y con otras gentes. Mi difunto suegro primero, era íntimo amigo de, de Indalecio Prieto. Sin embargo, con la guerra en Cataluña lo desconocieron, cuando los hijos de mi... o sea, mis cuñados y eso, han sido de los que han dado la cara, de los que han estado presos muchísimos años y de los que han dado la vida por la organización. Y a él lo desconocieron.
MM.- Claro.
CU.- Entonces, quiero decirte que, que, que no ves…
MM.- Sí, que hay una desunión por todas partes.
CU.- Exactamente.
MM.- Entre los mismos…
CU.- De izquierda.
MM.- De izquierda, pero unos…
CU.- Porque por ejemplo…
MM.- … de otra.
CU.- Eso. Porque, por ejemplo, ya sabemos que cada uno tiramos para lo nuestro, ¿verdad? Pero, como yo digo, ‘el que más chifla, capador’, ¿no?
MM.- Claro.
CU.- O sea, por ejemplo, quiero yo decir que, por ejemplo, pues los republicanos… “pues si puedes más, pues hazle la lucha y a ver si, si nos apagas a nosotros”, ¿no?
MM.- Claro.
CU.- O el socialista o eso. Pero en ciertas cosas debemos de tener unidad.
MM.- Unidad.
CU.- Exactamente, debemos de tener unidad. Y ésa es la que no se consigue, que cuesta muchísimo y costará muchísimo.
MM.- Oye, Cristina, ¿tú te sigues sientiendo refugiada?
CU.- Yo me sigo sintiendo emigrada política, a pesar de todo, toda la vida, no lo puedo evitar.
MM.- ¿No te has llegado a sentir mexicana?
CU.- No. A mí me pasa una cosa que te quiero decir. Es una cosa que no puedo yo separar ni España ni México. O sea, yo defiendo a México, tengo nietos… tengo hijo mexicano, tengo nietos, yerno, mi marido enterrado aquí; o sea, yo defiendo al pueblo mexicano como puedo defender al mío o más. Porque, por ejemplo, pues yo me he enfrentado a veces con gente donde les digo: “Bueno, ustedes no defienden ni a su misma gente”. Yo sí trato de defenderla y de, y de hacerla ver, y de ver que se unan y de ver que se defiendan y de ver que, que hagan cosas en contra de ciertas situaciones que no hay derecho, ¿no? [Interrupción]… por el pueblo de México y por el pueblo de España, ¿no? O sea, quiero decir, para mí… no, no lo discrimino, al contrario. O sea, son dos cosas que yo considero que no podemos separar la mayoría de los españoles, ¿no? Yo al menos así lo pienso; yo, en mi interior, así lo siento. O sea, quiero decir que es muy difícil que podamos, de plano, ‘pues yo me voy a España y me… y soy española’; es muy difícil que eso lo podemos decir. Son cuarenta años que llevamos aquí, casi; yo, 36, pero, pero es muy… Quieres, quieras o no, aunque veas cosas que no te agraden o que veas lo que tú pienses y sueñes, pero hay cosas que… También tiene, cosas buenas, ¿no?, y modo de vivir y modo de luchar y modo de… Los hijos ya están criados aquí, los nietos están criados aquí, y quieras o no es un pueblo que… También he querido a Santo Domingo, ¿cómo no lo voy a querer, verdad? También lo he querido y me gustaría poder volver a él y todo. Pero son dos cosas que yo siempre he pensado que no puedo separar, yo por lo menos, ni España ni México, ni México ni España; para mí los dos es uno, digamos.
- Idioma
- Español
- Temática
- Temporal
- Siglo XX
- Origen
- Lugar
- Ciudad de México, México
- Fecha de creación
- 1980
- Personas/ Instituciones
- Cristina Ulibarri González: Entrevistado
- Matilde Mantecón de Souto: Entrevistador
- Dolores Pla Brugat: Director de proyecto
- María Esther Jasso: Conservador de obras
- Marcela Cobos: Conservador de obras
- Instituto Nacional de Antropología e Historia: Conservador de obras
- Ministerio de Cultura de España: Conservador de obras
- Tipo de recurso
- Entrevista
- Descripción física
- Extensión
- 174 pp.
- Duración
- 03:42:37 hrs.
- Identificadores
- MID
- 47_20190819-165741:117
- Inventario
- PHO_10_79
- Catalogación
- Fuente
- Instituto Nacional de Antropología e Historia
- Idioma
- Español
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Vista Impresión
- Título(s)
- Título
- Entrevista realizada a Cristina Ulibarri por Matilde Mantecón
- Proyecto de historia oral. Refugiados españoles en México
- Contenido
ANTECEDENTES: Nace en Santander en 1917, de familia campesina. Recibe educación religiosa y cursa dos años de primaria. A los 10 años sale a trabajar de sirvienta. Primeros desengaños religiosos. Primeras lecturas sobre socialismo. Trabaja en Bilbao para unos nacionalistas vascos. Conoce a Santiago Viguera y entra en contacto con las Juventudes Socialistas.
REPÚBLICA: Muy jóven aun, reacciona con curiosidad ante el derrocamiento del Rey y la proclamación de la República. Se muestra a favor del alzamiento minero en Vizcaya y Asturias en 1934. Presencia la salida de los mineros presos en Bilbao. Santiago Viguera es encarcelado, junto con otros muchos, por su participación en la huelga minera de Vizcaya. Critica el acoso a los nacionalistas vascos. Primer contacto con mexicanos en Bilbao. Se hace novia de Santiago Viguera.
GUERRA CIVIL: El proyecto de los nacionalistas vascos en Bilbao. Se alista como enfermera, por la UGT, en Bilbao. Participación de los curas en la guerra. Santiago Viguera marcha al frente y es herido de gravedad. Toma parte en la defensa de Vizcaya y es condecorada por el gobierno de Aguirre. Se constituye la Juventud Socialista Unificada. Al caer Bilbao, pasa a Santander y luego, junto con Santiago Viguera, se refugia en Asturias. Salen juntos a Francia, llegan a Pauillac y vuelven a entrar a España por Cataluña. Santiago Viguera es hospitalizado en Barcelona, después en Valencia en Gerona; se casan en Gerona y él marcha al Ebro. Ella permanece en Gerona, con otros emigrados del norte, y ahí nace su hija. Dificultades para subsistir en Gerona; caída de Cataluña y salida a Francia con su hija.
EXILIO: Estancia y penalidades en Bourg de Péage y Pierrelatte. Santiago Viguera pasa por varios campos de concentración en Francia y finalmente es trasladado a un hospital de Bayona. Salida, por Burdeos, en el barco La Salle hacia la Repóblica Dominicana. Primeras impresiones y contactos con el pueblo dominicano. Estancia en Dabajón y El Seibo. Vida en colectividad y actividad teatral en la colonia Pedro Sánchez. Les es retirado el subsidio de la República y se marchan a la capital dominicana. Se emplea con una familia española de antiguos residentes y, junto con su esposo, se establece en comunidad con otros emigrados. Por mediación de los cuáqueros, Santiago Viguera sale del país. Se reúne con su marido en Cuba. Tras una breve estancia ahí, llegan a México en 1944. Ayuda al SERE. Choques con los antiguos residentes. Impresiones acerca de los mexicanos. Solidaridad entre los emigrados. Trabajo y vida cotidiana en el Distrito Federal. Traslado y estancia en Veracruz, donde nace su segundo hijo. Participación en una granja instalada por el PCE. Enfrentamientos con la policía montada en Las Granjas. Su esposo muere en 1954. Trabajó en el Frontón Colón y el Frontón Metropolitano. Matrimonio de su hija con un mexicano. Relatos de sus años de trabajo en el frontón, 1954-1972. Viaja a España en 1960. Participa en el conflicto laboral de los trabajadores del Frontón Metropolitano. Segundo matrimonio y militancia en el PCE. Opina sobre las circunstancias actuales de la izquierda española y la situación política en España. Sentimientos hacia México y España. Segundo viaje a España. Trayectoria de sus hijos: la cuestión de la identidad.
- Fragmento
CU.- Todo lo que se podía se ayudaba, tanto en, tanto en el grupo de Partido Comunista Español como en el grupo de, de las Mujeres Antifascistas españolas. O sea que siempre se ha ayudado, ¿no?
MM.- Oye, y cuando murió Franco, ¿qué, qué sentiste? ¿cuál fue tu reacción?
CU.- Pues mi reaccion… hice… o sea, alegría desde luego, y pensar… ¿qué te diré yo? ¿cómo se dice esto que, que sucede en la vida? Yo tengo una manera de ser que no se cómo explicártelo, como que presiento las cosas. Y, y mi difunto marido me decía que era una condición de clase que tiene uno, no sé por qué razón pero que así es, ¿no? Porque has sufrido desde chica o porque has trabajado desde chica o lo que sea, o porque has visto muchos desengaños, que te vas dando cuenta; o sea, siempre tengo una suspicacia, ¿verdad? Y aunque me dio mucho gusto y todo, y estoy feliz de que eso haya sucedido, y sé que cuesta mucho sacar adelante el país y que nos costará muchísimo, que quién sabe si lo lleguemos nosotros a ver; ver en España, digamos, pues un socialismo, ¿verdad?, o algo así, moderado, yo no pido…
MM.- Extremos.
CU.- … extremos sino que… pues lo veo difícil. Y claro, me dicen que soy… ¿cómo se dice? ¿optimista o pesimista?
MM.- Sí. Pe…
CU.- ¿Cómo se dice? Cuando uno presiente una cosa, que, que, que no lo ves claro.
MM.- Ajá.
CU.- ¿Optimista o pesimista?
MM.- Pesimista.
CU.- Pesimista. Y yo no lo veo claro porque, por ejemplo, cuando…
MM.- Pesimista…
CU.- Eso es. Cuando me dicen, aunque yo creo en eso y no cedo ni me baja la moral -porque no me baja la moral para, eso a mí para nada-, pero sin embargo siento feo esa, esas situaciones. Por ejemplo, la unificación con los socialistas: yo sé que no se hará nunca.
MM.- Y que esté el rey y lo encabece, sobre todo [risa].
CU.- Bueno, el rey yo lo admito porque, aunque hayamos luchado contra el rey, con el rey hemos nacido, ¿verdad?, la mayoría de los que emigramos. Esto, y aunque esté el rey… el rey va parando la, la situación que hoy hay en España. Porque en España hay una situación que no es fácil resolver ni con las izquierdas ni con las derechas, ni con los republicanos ni con los socialistas ni con nadie. rorque han dejado ellos una papeleta muy fea y que solamente -se puede decir, a pesar de, de, de nuestro desconforme- gracias al rey se está aguantando el que no haya habido una revuelta. La, la verdad es esa, no nos engañemos. Porque nuestro pueblo [ininteligible] en contra de las fuerzas que estábamos fuera. ¿Entonces? Si, si hubiese habido un golpe militar o algo así, ¿qué? Los socialistas, que somos los que debimos de haber estado juntos… Como yo le dije una vez a Chucho, a Chucho Bernárdez, del Centro Republicano, digo: "¿Por qué salimos de España? Por la guerra, ¿verdad? ¿No podemos unirnos lo mismo que entonces para poder regresar a ello? O sea, dejar nuestra parte un poquito a un lado… no dejarla: ni, ni tú tu partido, ni yo el mío, ni el otro ni el otro, pero unirnos en las cosas elementales para luchar contra estas cosas. Y me decía él que, que eso que no es posible.
MM.- Hay un interés de partido.
CU.- Sí. Y no, no es posible, y no se reúnen. Yo lo, se, que no hay unificación, es muy difícil porque… la familia de mi primer marido es de origen socialista y yo me he dado cuenta de los problemas que había; aunque con ellos no, pero sí había con mi hermano y con otras gentes. Mi difunto suegro primero, era íntimo amigo de, de Indalecio Prieto. Sin embargo, con la guerra en Cataluña lo desconocieron, cuando los hijos de mi... o sea, mis cuñados y eso, han sido de los que han dado la cara, de los que han estado presos muchísimos años y de los que han dado la vida por la organización. Y a él lo desconocieron.
MM.- Claro.
CU.- Entonces, quiero decirte que, que, que no ves…
MM.- Sí, que hay una desunión por todas partes.
CU.- Exactamente.
MM.- Entre los mismos…
CU.- De izquierda.
MM.- De izquierda, pero unos…
CU.- Porque por ejemplo…
MM.- … de otra.
CU.- Eso. Porque, por ejemplo, ya sabemos que cada uno tiramos para lo nuestro, ¿verdad? Pero, como yo digo, ‘el que más chifla, capador’, ¿no?
MM.- Claro.
CU.- O sea, por ejemplo, quiero yo decir que, por ejemplo, pues los republicanos… “pues si puedes más, pues hazle la lucha y a ver si, si nos apagas a nosotros”, ¿no?
MM.- Claro.
CU.- O el socialista o eso. Pero en ciertas cosas debemos de tener unidad.
MM.- Unidad.
CU.- Exactamente, debemos de tener unidad. Y ésa es la que no se consigue, que cuesta muchísimo y costará muchísimo.
MM.- Oye, Cristina, ¿tú te sigues sientiendo refugiada?
CU.- Yo me sigo sintiendo emigrada política, a pesar de todo, toda la vida, no lo puedo evitar.
MM.- ¿No te has llegado a sentir mexicana?
CU.- No. A mí me pasa una cosa que te quiero decir. Es una cosa que no puedo yo separar ni España ni México. O sea, yo defiendo a México, tengo nietos… tengo hijo mexicano, tengo nietos, yerno, mi marido enterrado aquí; o sea, yo defiendo al pueblo mexicano como puedo defender al mío o más. Porque, por ejemplo, pues yo me he enfrentado a veces con gente donde les digo: “Bueno, ustedes no defienden ni a su misma gente”. Yo sí trato de defenderla y de, y de hacerla ver, y de ver que se unan y de ver que se defiendan y de ver que, que hagan cosas en contra de ciertas situaciones que no hay derecho, ¿no? [Interrupción]… por el pueblo de México y por el pueblo de España, ¿no? O sea, quiero decir, para mí… no, no lo discrimino, al contrario. O sea, son dos cosas que yo considero que no podemos separar la mayoría de los españoles, ¿no? Yo al menos así lo pienso; yo, en mi interior, así lo siento. O sea, quiero decir que es muy difícil que podamos, de plano, ‘pues yo me voy a España y me… y soy española’; es muy difícil que eso lo podemos decir. Son cuarenta años que llevamos aquí, casi; yo, 36, pero, pero es muy… Quieres, quieras o no, aunque veas cosas que no te agraden o que veas lo que tú pienses y sueñes, pero hay cosas que… También tiene, cosas buenas, ¿no?, y modo de vivir y modo de luchar y modo de… Los hijos ya están criados aquí, los nietos están criados aquí, y quieras o no es un pueblo que… También he querido a Santo Domingo, ¿cómo no lo voy a querer, verdad? También lo he querido y me gustaría poder volver a él y todo. Pero son dos cosas que yo siempre he pensado que no puedo separar, yo por lo menos, ni España ni México, ni México ni España; para mí los dos es uno, digamos.
- Idioma
- Español
- Temática
- Temporal
- Siglo XX
- Origen
- Lugar
- Ciudad de México, México
- Fecha de creación
- 1980
- Personas/ Instituciones
- Cristina Ulibarri González: Entrevistado
- Matilde Mantecón de Souto: Entrevistador
- Dolores Pla Brugat: Director de proyecto
- María Esther Jasso: Conservador de obras
- Marcela Cobos: Conservador de obras
- Instituto Nacional de Antropología e Historia: Conservador de obras
- Ministerio de Cultura de España: Conservador de obras
- Tipo de recurso
- Entrevista
- Descripción física
- Extensión
- 174 pp.
- Duración
- 03:42:37 hrs.
- Identificadores
- MID
- 47_20190819-165741:117
- Inventario
- PHO_10_79
- Catalogación
- Fuente
- Instituto Nacional de Antropología e Historia
- Idioma
- Español
- Biblioteca Manuel Orozco y Berra
- Biblioteca de Antropología e Historia Eusebio Dávalos Hurtado
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